top of page

T9-Riesgos de la TC, estrategias de reducción de dosis

Dosis recibidas en TAC

La Dosis de Radiación Absorbida durante una exploración de Tomografía Computarizada es una magnitud física que se utiliza para expresar la cantidad de energía que se deposita en los tejidos de una persona cuando se la somete a una exploración de Tomografía Computarizada.

Este indicador es calculado automáticamente por el aparato y permite conocer de manera real, la dosis absorbida por cada persona. Con la irrupción de los escáneres modernos multicorte, las posibilidades diagnósticas han aumentado notablemente, pero también la dosis de rayos X.

Hay dos procedimientos físicos distintos para realizar un examen de Tomografía Computarizada:

  • Secuencial (corte a corte): adquisición alternando disparo y movimiento de mesa con el paciente

  • Helicoidal: el traslado o movimiento de mesa y el disparo se produce simultáneamente. De esta manera, el trayecto que el tubo realiza respecto al paciente es helicoidal o espiral, como un muelle alrededor de un eje.

Para la mayoría de las exploraciones craneoencefálicas se utiliza el primero pero, cada vez con más frecuencia se recurre al segundo (no obstante la dosis de radiación absorbida aumenta, secuencial 530 mGy/cm -> helicoidal 960 mGy/cm)

Estas dosis administradas se pueden observar en las siguientes tablas:

Problemática que supone la radiación recibida por TAC.

Por lo que se refiere a los efectos biológicos sobre la materia viva, atendiendo a la naturaleza del daño que producen, se clasifican en:

  • Deterministas: Sólo aparecen a partir de una dosis umbral. Por encima de este valor un número muy importante de células muere o deja de dividirse, lo que provoca una lesión morfológica y funcional del órgano o tejido. Dado que las dosis umbrales son muy elevadas (1-2 Gy), no los tendremos en consideración en las exploraciones con TC

  • Probabilísticos: Carecen de un umbral de dosis y son fruto de las transformaciones de células no reparadas. La probabilidad de que se produzcan es proporcional a la dosis efectiva recibida, lo denominado: “lineal sin umbral”, que se construye a partir de la extrapolación de los resultados obtenidos para personas sometidas a mayores dosis y tasas de dosis.

Un problema muy grave es que por la falta de comunicación entre los diferentes especialistas médicos y los radiólogos contribuye a que se someta a los pacientes a exploraciones innecesarias, así como la tendencia a una medicina llamada preventiva que utiliza recursos diagnósticos adversos por la exposición a diversas radiaciones.

El aumento de tiempo de exposición a estas dosis hace que aumenten los efectos estocásticos, aunque al estar por debajo de la umbral, no se producen deterministas.

Las principales causas de esta sobreexposición no justificada son las siguientes:

1. Repetición de pruebas efectuadas con anterioridad.

2. Solicitud de excesivas pruebas complementarias.

3. Falta de toda información de pruebas de diagnóstico.

4. Prescripción de exploraciones con una frecuencia mayor a la de la evolución de la enfermedad que, por tanto, no servirán para modificar el tratamiento.

5. Petición de pruebas inadecuadas.

Para evitar estas malas prácticas es necesario que todas las Unidades Asistenciales de Radiodiagnóstico dispongan de los criterios de justificación de exploraciones radiológicas.

Minimización de dosis recibida por TAC:

La primera regla de optimización es tener una buena justificación para realizar la prueba.

Existen protocolos para llevar a cabo un procedimiento correcto a la hora de solicitar pruebas radiológicas:

“Guía de indicaciones para la correcta solicitud de pruebas de diagnóstico por imagen” (1)

Donde se citan medidas a tomar en la realización de un TAC:

  • Dadas las dosis potencialmente elevadas, sólo seprocederá a una TC tras la adecuada justificación clínica por un radiólogo experimentado.

  • Las exploraciones de niños exigen un mayor nivel de justificación, pues estos pacientes son más vulnerables a la radiación.

  • Conviene sopesar, cuando la clínica lo permita, el empleo alternativo de técnicas no ionizantes, más seguras (ecografía y RM), o el de técnicas radiográficas a dosis bajas.

  • No se efectuará una TC de abdomen ni de pelvis a pacientes embarazadas sin una sólida justificación clínica. En caso de realizarla, se prestará especial atención al empleo de dosis bajas.

  • Siempre hay que prestar atención para minimizar la exposición de los ojos, especialmente de los pacientes que quizá deban someterse a múltiples exploraciones.

El segundo factor importante para la minimización es la buena práctica(2).

  • Disminuir la longitud irradiada.

  • Evitar cortes en zonas innecesarias.

  • Evitar que los cortes pasen por órganos sensibles.

Modulación en Z

  • Optimizar los protocolos con la disminución de los mAs sin pérdida de calidad diagnóstica (modulación en el eje Z).

  • Utilizar el CAE y adaptar adecuadamente los parámetros de barrido.

  • Elegir técnicas adecuadas para cada paciente pensando en el concepto de ALARA fundamentalmente en pediatría.

  • Minimizar el número de secuencias o fases en los estudios (con y sin contraste).

  • Aumentar el valor del pitch (>1).

  • Utilizar la angulación del gantry excluyendo órganos sensibles del volumen irradiado.

  • Emplear medios de protección accesibles, (blindajes para gónadas, tiroides, protectores de mama y cristalino (bismuto), reducen 30-60% dosis en el órgano)

  • Hacer un estudio dosimétrico de cada técnica y comparar con los niveles de referencia.

Calibración

La calibración es imprescindible para que las imágenes tomadas en una prueba sean válidas y no sea necesario volver a repetirlas, sometiendo al paciente a una dosis extra de radiación (con lo que ello conlleva) que no hubiera sido necesaria si el tomógrafo hubiera estado bien calibrado.

Calibración diaria

Es muy importante realizar calibraciones periódicas para comprobar que el agua sigue siendo representada por el cero y los restantes materiales por sus números correspondientes de TC. Se recomienda una calibración diaria mediante la utilización de fantomas, maniquíes para la calibración del tomógrafo.

La calibración diaria del sistema de detectores del aparato se realiza inmediatamente después de haber finalizado el calentamiento del tubo de rayos X. Es un procedimiento técnico imprescindible para que el aparato funcione correctamente. El proceso es muy rápido y sencillo. El Técnico activa la opción de Calibración (Fast Calibration) y el sistema comprueba el estado de los colimadores, los detectores y los parámetros físicos de adquisición de datos: kilovoltios (Kv), miliamperios (mAs) etc.

Si el aparato no ha sido calibrado, puede suceder que las imágenes sean de poca calidad (aparecen una serie de anillos concéntricos oscuros o que al imprimirlas no reproduzcan fielmente lo que se ve en la pantalla del monitor. En la siguiente imagen se puede ver un artefacto “en diana” producido por la desconfiguración de los detectores. Para que no vuelva a aparecer habrá que hacer una calibración.

Calibración periódica:

Esta función, es competencia exclusiva del ingeniero que realiza el mantenimiento mensual del aparato. El procedimiento es mucho más complejo que la calibración diaria. También se lleva a cabo cuando se ha sustituido el tubo de rayos X por otro nuevo, porque se ha inutilizado el anterior.


Search By Tags
No hay etiquetas aún.
Follow "THIS JUST IN"
  • Facebook Basic Black
  • Twitter Basic Black
  • Google+ Basic Black
bottom of page